Hace muchos muchos años, en un lejano lugar, vivía un joven llamado Temeroso. Era un chico corriente, de mediana estatura y más bien flacucho. No llamaba mucho la atención salvo quizás por su extraña mirada, siempre huidiza, y su forma de caminar, con paso rápido, escondiéndose en cada portal, parándose...