Todo lo que pensamos irremediablemente se refleja en nuestros sentimientos, y éstos a su vez en nuestras acciones. Si estamos convencidos de que algo saldrá bien, encontraremos evidencias que refuercen nuestros pensamientos, y actuaremos bajo un estado de ánimo que nos llevará a conseguirlo. Del mismo modo, cuando todo a nuestro alrededor se vuelve oscuro, no conseguiremos hayar la luz, aunque el sol siga brillando como siempre, ya que para nosotros habrá desaparecido tras las nubes.